En mayo de 1810 se encontraba encendida la chispa revolucionaria… Se respiraba revolución en las calles y en los lugares secretos donde podían desarrollarse ideas de ruptura con la opresión española.

El 25 de mayo de 1810 no es una fecha más para los argentinos y las argentinas, pero la historia no se reduce al Cabildo y a la conformación del primer gobierno patrio. La Revolución de Mayo de 1810 es un segmento de un complejo y contradictorio proceso el cual tuvo al pueblo como un partícipe decisivo en la lucha contra el dominio de España; imperio que oprimió durante siglos a la población de estas latitudes.

El recuerdo de este hecho histórico nos une hoy pero además pretendemos que sea un símbolo para recordar a otros que lucharon por la patria y como homenaje a quienes lo hacen cotidianamente desde diferentes lugares. A través de estas líneas pretendemos poder reflexionar acerca de nuestro propio papel como ciudadanos y sobre el significado de la verdadera libertad.

En 1810 estas tierras pertenecían al Virreinato del Río de la Plata. Éramos una colonia de España cuyo rey era Fernando VII.

El 25 de mayo de 1810 se logró desalojar al virrey español Cisneros del poder de Buenos Aires y se conformó la Primera Junta de Gobierno criolla. Algunos criollos revolucionarios eran partidarios de declarar la total independencia de la metrópoli. Sin embargo, la nueva Junta Provisional de Gobierno se presentó como heredera de las autoridades metropolitanas y en una proclama dirigida al pueblo manifestó su fidelidad y obediencia al monarca español. Por otra parte, muchos porteños pretendían que las provincias se subyugaran bajo su poder. Entonces, en la Revolución de Mayo hubo que luchar no solo contra los españoles, sino también contra Buenos Aires que pretendía que los pueblos dependieran de ella.

Pero, ¿quiénes provocaron los verdaderos cambios profundos y potentes?, es decir, ¿quiénes hicieron la verdadera revolución?

La hicieron aquellos que venían luchando en América desde muchos años antes: aborígenes, negros, gauchos, criollos, mestizos que dieron su vida antes y después del 25 de mayo por sacar a España de esta tierra. Sin la pelea de todos ellos, los cabildantes nunca hubiesen podido deponer al Virrey. Los combates del pueblo se constituyeron en el verdadero espíritu revolucionario de la época.

Pensar y debatir sobre los sucesos del pasado, nos permite cuestionar aspectos de la realidad actual:

• ¿Podemos afirmar hoy en día que somos una “patria libre” de toda dominación extranjera, cuando nuestra economía depende de las naciones más poderosas?
• ¿Qué ideales de independencia económica, soberanía política y liberación nacional, como pueblo, defendemos hoy?
• ¿Podemos hablar del ejercicio irrestricto de nuestra “soberanía”, cuando nuestro territorio se halla usurpado por capitales multinacionales?

Nos toca a nosotros, desde diversos lugares, retomar aquellos ideales…, pero los más puros y verdaderos, y formular un nuevo significado de la palabra REVOLUCIÓN. Un significado que abarque el derecho de cada argentino, de cada americano, de participar, pensar, enseñar y protagonizar las luchas por la liberación política, económica, cultural y social. Nada más ni nada menos.

El 25 de mayo de 2020 será recordado de manera muy especial por los y las argentinas, dado que a diferencia del resto de las conmemoraciones de nuestra fecha patria, no podremos participar de los tradicionales desfiles ni de los actos escolares convencionales. Viendo que nos encontramos en el marco del aislamiento, social, preventivo y obligatorio a raíz de la pandemia del COVID-19, y más allá de las circunstancias señaladas, animamos a que el espíritu con el que celebremos este 25 de Mayo sea el mismo de todos los años. En ese sentido invitamos a cada familia de la comunidad educativa del Instituto de Vanguardia a que este 25 de mayo decore su casa con la bandera argentina en conmemoración de aquellos héroes patrios que comenzaron a escribir la historia de la Argentina.

¡Feliz día de la patria!